Los clientes destacan la excelente ubicación en la playa, con una piscina y vistas impresionantes al océano desde las habitaciones.

Las casas tradicionales tailandesas suelen tener una estructura de bambú o madera, elevadas sobre pilotes y con un techo inclinado a dos aguas.

Además de la comida, este negocio ofrece servicios de spa con masajes tailandeses, creando una experiencia completa de relajación y bienestar para los clientes.

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